Nunca Olvidado

Septiembre 02, 2025

Tenemos acceso confiado al trono de la gracia de Dios siempre que necesitamos ayuda.

Al entrar en un nuevo mes, hay una verdad poderosa que debemos abrazar: Dios te recuerda. Mientras que las personas pueden olvidar tu bondad, tus contribuciones o incluso tu existencia, nuestro Padre celestial nunca olvida. Así como Él estuvo con José durante la traición, las falsas acusaciones y la prisión, Él está contigo hoy. Exploremos cómo alinear nuestros pensamientos con Sus promesas y experimentar Su presencia infalible. 

La presencia inmutable 

La historia de José en Génesis revela una verdad profunda sobre el carácter de Dios. A pesar de enfrentar la traición de sus hermanos, ser vendido como esclavo y ser encarcelado injustamente, una cosa permaneció constante: 

"Pero el SEÑOR estaba con José y le mostró misericordia, y le dio favor delante del custodio de la cárcel." — Génesis 39:21 

Todo en la vida de José estaba cambiando: sus circunstancias, su ubicación, su estatus, pero la presencia de Dios nunca se fue. La Biblia enfatiza repetidamente este punto en Génesis 39, mencionando cuatro veces que "el Señor estaba con José." Esto no fue solo retórica espiritual; se manifestó como favor tangible, incluso en la prisión. 

Cuando la vida parece inestable e impredecible, recuerda que la presencia de Dios es tu única constante. Él no te abandona cuando las circunstancias se ponen difíciles. Su amor no disminuye cuando otros te rechazan. Su plan no cambia cuando surgen obstáculos. 

Cuando las personas olvidan 

Quizá uno de los momentos más dolorosos en el camino de José vino cuando interpretó el sueño del copero, pidiendo solo ser recordado cuando el hombre recuperara su posición. Sin embargo Génesis nos dice: 

"El principal de los escanciadores no se acordó de José, y lo olvidó." — Génesis 40:23 

¡Qué devastador ser olvidado por la misma persona que podría haber ayudado! José permaneció en la prisión dos años más debido al olvido humano. Este patrón se repite en nuestras vidas: las personas olvidan nuestra bondad, pasan por alto nuestras contribuciones y, a veces, incluso nuestra existencia. 

Pero aquí está el hermoso contraste: 

"Dios se acordó de nosotros cuando estábamos abatidos; su amor nunca falla." — Salmo 136:23 (paráfrasis) 

A diferencia del copero, a Dios nunca le fallan la memoria respecto a Sus hijos. La sangre de Jesús continuamente habla cosas mejores a nuestro favor, 

"A Jesús, mediador de un nuevo pacto, y a la sangre rociada que habla mejor palabra que la sangre de Abel." — Hebreos 12:24 

Cuando te sientas olvidado por otros, recuerda que siempre estás en la mente de Dios. 

Alineando tu imaginación 

Nuestras mentes son herramientas poderosas dadas por Dios, pero a menudo las usamos para imaginar escenarios catastróficos, fracasos y desilusiones. El verdadero éxito llega cuando alineamos nuestro pensamiento con la Palabra de Dios. 

Esto no es simplemente pensamiento positivo; se trata de sincronizar nuestra mente con la verdad divina. Cuando llenamos nuestra imaginación con las promesas de Dios en lugar de nuestros miedos, nos posicionamos para recibir Sus respuestas favorables. 

José nunca olvidó el sueño que Dios le dio, aun cuando las circunstancias hacían que su cumplimiento pareciera imposible. Su fe inquebrantable en la promesa de Dios lo sostuvo durante años de dificultad. 

Acercándose al trono 

Uno de nuestros mayores privilegios es el acceso al trono de la gracia de Dios: 

"Acerquémonos, pues, con confianza al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro." — Hebreos 4:16 

Fíjate en la instrucción de venir con confianza. No con arrogancia, sino con la tranquila certeza de que somos bienvenidos. Dios está disponible las 24 horas del día, ansioso por ayudar, listo para proveer misericordia y gracia precisamente cuando la necesitamos. 

A diferencia de las relaciones humanas, donde el acceso es limitado y condicional, nada nos impide acercarnos a Dios. Por medio de Jesús, tenemos acceso directo al Padre: a Su presencia, a Su sanidad, a Su favor y a Su éxito. 

Conclusión 

Mientras avanzas en este año, recuerda que el favor de Dios reposa sobre ti. Mientras la gente puede olvidar, Dios recuerda. Mientras las circunstancias cambian, Su presencia permanece constante. Estás sentado con Cristo en lugares celestiales, posicionado por encima de tus problemas, no por debajo de ellos. 

Este es tu año de respuesta favorable. Sea lo que estés buscando —sanidad, provisión, breakthrough, restauración— Dios te recuerda y Su amor nunca falla. Confía no en personas que pueden olvidar, sino en el Dios que siempre recuerda. 

Reflexiona sobre esto 

1. ¿En qué áreas de tu vida te sientes olvidado, y cómo cambiaría tu perspectiva el recordar la constancia de la presencia de Dios? 

2. ¿Cómo puedes alinear intencionalmente tu imaginación con la Palabra de Dios en lugar de con tus miedos o desilusiones pasadas? 

Oración 

Padre, te doy gracias porque Tú te acuerdas de mí siempre. Tu amor nunca falla, aun cuando estoy en mi punto más bajo. Declaro que estoy sentado con Cristo por encima de mis problemas, no por debajo de ellos. Tu favor me rodea como un escudo. Este año recibo Tus respuestas favorables a mis oraciones. Tu sangre habla cosas mejores sobre mi vida, mi familia y mis circunstancias. Nunca soy olvidado, nunca estoy abandonado, siempre soy amado. En el nombre de Jesús, amén. 

Puntos clave 

• La presencia de Dios permanece constante incluso cuando todo lo demás cambia. 

• Las personas pueden olvidarnos, pero Dios siempre recuerda y Su amor nunca falla. 

• Alinear nuestra imaginación con la Palabra de Dios nos posiciona para recibir Sus respuestas favorables. 

• Tenemos acceso confiado al trono de la gracia de Dios siempre que necesitamos ayuda. 

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